Palmeiras luchó con todo lo que tenía, pero no logró mantenerse vivo en la Copa Mundial de Clubes. Este viernes, en Filadelfia, el equipo de Abel Ferreira se enfrentó al Chelsea, empezó perdiendo, consiguió fuerzas para buscar el empate, pero fue castigado en los minutos finales: 2 a 1.
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Con este resultado, el Verdão dice adiós al torneo y ve cómo los Blues avanzan a las semifinales para enfrentarse a otro brasileño: el Fluminense, que eliminó al Al Hilal en Orlando.
Superioridad inglesa
Chelsea tomó la iniciativa desde el primer minuto y dejó pocas oportunidades a Palmeiras en Filadelfia. A los cinco minutos, Cole Palmer recibió en la entrada del área, se acomodó para su pierna derecha y disparó fuerte, siendo detenido por una buena defensa de Weverton.
Poco después, la presión londinense tuvo efecto. En otra buena jugada por la derecha, Chalobah avanzó con espacio y pasó a Palmer, quien giró bien en la entrada del área, se libró de la marca y finalizó ajustado al poste, sin oportunidades para el portero.
Después del gol, los Blues siguieron controlando el juego, dominaron el campo adversario y no aumentaron su ventaja solo por la falta de precisión en la finalización.
Por otro lado, el equipo de Abel Ferreira tardó en asimilar el juego y, con Estêvão muy bien marcado, solo consiguieron algún equilibrio en los minutos finales del primer tiempo. A los 41, Vanderlan tuvo la principal oportunidad para Palmeiras, pero Robert Sánchez defendió con tranquilidad.
Castigo al futuro club e igualdad en el marcador
Tras el descanso, Abel Ferreira hizo los ajustes necesarios y Palmeiras fue otro en la segunda mitad. Tanto es así que, a los ocho minutos, el Verdão logró el empate.
Después de una buena jugada por la derecha, Richard Ríos atacó el espacio y pasó bien a Estêvão, quien enfrentó la marca de Colwill y, aunque sin ángulo, disparó bonito al fondo de la red. El balón incluso golpeó el travesaño antes de entrar.
En respuesta al gol encajado, Enzo Maresca reaccionó rápido y promovió el debut de João Pedro, recién llegado del Brighton, y también puso en juego a Madueke, buscando generar más volumen ofensivo para los ingleses.
Por otro lado, Abel Ferreira apostó por su amuleto: Paulinho, que entró para dar profundidad por el lado izquierdo del ataque alviverde. Como era de esperar, el juego se abrió y ofreció buenos espacios para ambos lados.
Hasta que a los 38, tras un saque de esquina corto por la izquierda, Malo Gusto recibió cerca de la línea de fondo y buscó el centro. El balón se desvió en Giay en el camino y engañó a Weverton, que no pudo hacer la parada: 2 a 1.
En los minutos finales, Palmeiras se lanzó a la desesperada y casi vio cómo su desventaja aumentaba. João Pedro y Madueke coquetearon con el tercer gol, pero Weverton no lo permitió. Fin del juego y Chelsea clasificado para las semifinales de la Copa Mundial de Clubes.
